El 5 de mayo de desató el mayor incendio de los 40 registrados en el oeste de Canadá. Este mismo incendio obligó evacuar a la ciudad entera de Fort McMurray, con alrededor de 80.000 habitantes, debido a la impotencia de los bomberos por culpa del viento y la altas temperaturas. El fuego ha afectado a más de 100000 hectáreas de tierra, constituida principalmente por bosques y matorrales.
Barrios enteros de la pequeña cuidad han sido destruidos por el fuego. La mayoría de los habitantes fueron evacuados casi sin pertenencias, y sin saber el final que les esperaba tanto a ellos mismos como a sus hogares. Se calcula el fuego se ha llevado por delante aproximadamente 1.600 construcciones, con una pérdida estimada de 6 millones de Euros. Sin embargo este fuego descontrolado no ha dejado heridos, ni fallecidos.
Además en el sur de la cuidad había dos campos petrolíferos, donde al menos 10 explotaciones han tenido que reducir sus producciones a causa de las evacuaciones y otras medidas de emergencia que dificultaron la extracción del crudo. Se estima que aproximadamente un tercio de la producción del petróleo a sido clausurada por el incendio.
Artículo recopilado por Alba Ye del periódico El País.
SEK Castillo. ECOSEK 